22 de des. 2009

ciutat-objecte






































La ciutat dels objectes perduts no existeix, es desfà a cada pas. És un castell de cartes desendreçat a les cantonades. Està farcida de dies malgirbats i de lleganyes de dimecres.
Les places d’aquesta ciutat floten a l’aire d’un transbordament de metro amb romanços a l’abordatge i carícies precuinades. Es mou amb nosaltres, copilot de bicicleta, experimentada caixa de pandora amb perles per esmorzar i dinars de tapes.
Els carrers de la nostra ciutat van plens de vianants fabricats. Ciutadans de països inventats, veïns de barris de lego, amants fingits, pares amb fills de porexpan, avis de residència, germanes per telèfon, tietes de mona de pasqua. Alcaldes de galet.
Ciutat-objecte.
Els habitants de la ciutat dels objectes perduts oloren llibres, abracen mitjanes, es moren de ganes, es donen vidilla, es tiren els trastos, reciclen amors de deixalleria.
Les finestres de la nostra ciutat s’obren al sol. Les portes dels nostres edificis recullen els fragments de les nostres màscares. Les que portem a la butxaca per si de cas, les que ens subtitulen la cara al pas de vianants, a la peixateria, a la barra del bar, al llit amb el guerrer de l’antifaç.
Màscares de pasta, ulleres venecianes.


* Il·lustració de Xavier Boronat

14 de des. 2009

por las esquinas

T spero n la skina dl cine. Qnto trdas? Tngo mxas ganas d vert


Stoy n el cruce d prlelo. Si ves q no llgo a tmpo ntra sin mi y ns vmos a la salida. Bss


(él creyó que era su primera cita, ella no lo tenía claro)

4 de des. 2009

noche de estreno

















patio de butacas
(oscuro.)
dos cabezas se acercan

olor a beso.

3 de des. 2009


2 de des. 2009

tanja





































Era demasiado guapa para ser puta. Ojos grises, cabello de seda, piel por estrenar.
Le sobraba talla para ser modelo. Pechos de pueblo, piernas de barrio, labios de pan.
Le faltaba interés para ser actriz. Ganas de calle, ansia de gentes, memoria de pez.
Le pesaban las calles de su pueblo. Demasiado pequeño para crecer, demasiado corto para correr, muy lejano para el retorno.
Se le caía la casa encima. Pocas habitaciones para la soledad, mucha gente para el silencio.
Se le manchaba el pasaporte. Verde dinero en el país de los rojos, rojo pobreza en el país de los ricos.
Se mareaba en la ciudad prometida. Calles estrechas para tanto culo, suelos de frío para tantos pies.
Se le secaban los vasos con tanta sed. manhattan sin torres, san francisco sin alcohol, ginebra sin copa, whisky de garrafa, cazalla de ajo, vino de cartón.
Era demasiado cara para sus clientes. Hooligans de fin de copa, ibéricos de mercadillo, tuaregs sin desierto, jubilados de domingo, divorciados de fin de año, solitarios de diario.
Era demasiado ruido para tanto silencio. Acento circunflexo en tierras de eñe, hache sonora en calles de e neutra, alfabeto cirílico en tiempos binarios.
Era demasiado guapa para ser puta. Ya no lo es.

* Ilustración de Álvaro Sobrino

1 de des. 2009

benjamín


En la pared, los honores futbolísticos locales. En las mesas, los horrores gastronómicos de la doña. Tras la barra, Benjamín. Anclado en este océano de carajillos, rodeado de náufragos de ciudad.
Rotundo como una palabrota, mastica palabras incomprensibles, por eso nadie paga la cuenta. En el bar de Benjamín la cuenta no se paga, se intuye. Se tantea a medio camino entre su balbuceo y el precio de mercado, sin contar la propina.
Y cada vez son menos los clientes iniciados en este arameo comercial. Escasean los bebedores con cuentas saneadas y abundan los crápulas en vías de extinción. Los primeros no entienden a Benjamín. Benjamín entiende demasiado a los segundos.
Por eso se hundió su bar-co. Por eso naufraga ahora entre contenedores y chapotea el dia dels trastos para seguir a flote. Por suerte para él (y para su doña) la semana tiene siete días y ésta ciudad, por lo menos, nou barris. 

*Il·lustració: Marcel F